CUENTO DE NAVIDAD

Este es un cuento que escribió mi hija Ana para un concurso que se hizo en el instituto donde ella estudia, sobre la Navidad. En el expresa su deseo de que todas las personas del mundo sean felices, y lo hace mezclando fantasía y realismo.

UNAS NAVIDADES DIFERENTES.

Había una vez una niña de nombre Frida que vivía con sus padres Laura y José y su hermana pequeña Carlota en una vieja casa colonial a las afuera de Madrid. Frida es una estudiante de 1º de Eso, tiene 12 años. Se caracteriza por ser una persona alta y delgada. Tiene el cabello largo, de color castaño y ondulado. Sus ojos son de color marrones. Se distingue por ser una persona muy agradable y cariñosa, siempre dispuesta a ayudar a sus compañeros de clase y muy segura de sus principios y valores. En su tiempo libre, Frida aprovecha para jugar al tenis, dibujar en su cuaderno de dibujo objetos, lugares, gentes que se encuentra en su vida diaria y quedar con sus amigas Telma y Celia para ir al cine o de compras.

 

Pasan octubre, noviembre y como todos los diciembres, la navidad se deja caer, la nieve se posa en el suelo y en las ramas de los pinos. Luces de todos los colores llenan la ciudad de Madrid. Calles, plazas y edificios están iluminados con millones de lámparas y decorados con bonitos adornos navideños que alegran a la gente.
 La navidad es su época preferida del año. Ella y su hermana Carlota siempre reciben muchos regalos por navidad como premio a sus buenas calificaciones.

Llego el día de poner el árbol de navidad en su rinconcito de siempre, enfrente de la puerta del salón, para que fuesen lo primero que mirarse la gente al entrar, Frida y Carlota eran las encargadas de decorarlo y de montar el Portal de Belén.

Frida y su hermana fueron a buscar la caja de los adornos del árbol pero no la encontraron, así que fueron a preguntarle a su madre.

-Mama ¿Dónde está la caja de los adornos para el árbol?

La madre le contesto:

-Tenéis que subir al desván que allí están los adornos del árbol y el Portal de Belén; metido en una caja grande de plástico de color roja.

 

Frida y su hermana suben al desván y las dos empiezan a buscar una caja de plástico roja, miran por un lado y por el otro del desván y entre tantas piezas, muebles y objetos viejos e inútiles aparecen la caja de adornos. Mientras buscaban los adornos, Carlota que eran una niña con una gran capacidad de observación se fijó en un objeto de gran volumen cubierto por una sábana blanca que le llamo mucho la atención.

Llamo a su hermana Frida.

-Frida, Fridaaaa.

-Que quieres le respondió.

-Ven he encontrado algo, ven a verlo.

Frida se dirige dónde está su hermana y Carlota le somete a muchas preguntas: ¿Por qué es el único objeto del desván que está cubierto con una sábana? ¿Ocultaran algo raro? ¿Crees que deberíamos destaparlo?

-No sé, Carlota déjame pensar que hacemos, le respondió.

Pasados unos minutos, Frida decide retirar la sabana del objeto y descubrir el misterio que esconden. Pero Carlota la detienen, Frida la tranquilizan diciéndole que no iba a pasar nada malo.

Frida quita la sabana y encuentra un viejo baúl de madera y chapa. Este baúl perteneció a un antepasado suyo muy famoso en su época por su magia y viajes en el tiempo.

Desde lejos se escuchaba la voz de su madre Fridaaa, Carlotaaa ¿habéis encontrado los adornos?

-Si mama, ya bajamos. Respondió Carlota.

Carlota y Frida acordaron subir más tarde y descubrir que había en el interior del baúl.

Una vez en el salón comenzaron a decora el árbol con figuritas navideñas, bolitas de colores, luces, estrellas, lazos, guirnaldas, etc…mientras sus padres tomaban una taza de café en la cocina charlaban sobre las noticias que salían en los periódico ese día. “Mucha gentes iban a pasar las navidades este año a la temperie, con frio, sin un plato de comida caliente que llevarse a la boca y sin nadie que les acompañen en estas fechas”. “Muchos niños, este año no iban a recibir su regalo de Reyes o de Papa Noel a causa de la crisis.

Finalizada la decoración del árbol, Frida y Carlota llaman a sus padres para enseñarle como había quedado  el árbol con los adornos.
 

Sus padres quedaron impresionados de los bonito que lo había dejado, no pueden evitar que algo se le remuevan en su interior quizás el amor, ternura que le tienen a sus hijas o quizás las noticias del periódico  que les habían conmovido; y piensa que son muy afortunados por tener una gran familia y muy agradecido a la vida por estar todos juntos.

Frida y Carlota estaban tan excitadas por averiguar lo que guardaban en su interior el misterioso baúl que pensaron un plan. Para que sus padres nos sospechasen nada de sus intenciones, las niñas les propusieron que fuesen ellos quien montase este año El Portal del Belén.

-Al principio sus padres dudaron de la propuesta de Frida y Carlota, ellos presentía que las niñas planeaban algo. Pero, ¿Qué podía ser?

Entonces Carlota dijo:

-Papa, mama todos los años somos nosotras quienes decoramos la casa porque vuestros trabajos no os dejan tiempo para hacerlo. Frida continúa diciendo:

-Os recuerdo que la navidad gira entorno a nuestras actitudes y sentimientos tales como la entrega, por eso este año queremos tanto Carlota como yo que toméis parte en la decoración de nuestra casa. Por favor.

Finalmente, sus padres accedieron a montar el Belén.

Las niñas corrieron hacia al desván y se colocaron de rodillas frente al baúl, se miraron la una a la otra y Frida dijo:

-Ha llegado el momento.

Muy lentamente Frida levanta la tapa del baúl y una luz resplandeciente sale de el que no les deja ver lo que había en su interior, pasados unos segundos Frida y Carlota pudieron ver lo que el baúl ocultaban en su interior.

Dentro hallaron un papel enrollado en forma de pergamino viejo y amarillento con unas instrucciones escritas en el, un reloj de cuco que permitía parar las horas, minutos y segundo e incluso viajar a otros lugares del mundo. Un lápiz y un cuaderno de dibujo mágico, todo lo que se dibujaba sobre él se hacían realidad. El pergamino avisaba de que Papa Noel y los Reyes Magos habían sido capturados por un elfo malévolo de nombre Grylo. El vestía con harapos que le cubría todo su cuerpo, siempre llevaba consigo un bastón largo de cascabeles y una bolsa de polvos mágicos amarrados al cinturón. Le acompañaba un gigantesco y feroz gato que permanecía al acecho durante la temporada navideña.

Grylo planeaban matar  Papa Noel y los Reyes Magos para quedarse con sus dones más preciados que eran: la sabiduría para conocer el camino de cada uno, el amor para proyectar la paz en el mundo, la fuerza para plantear una cultura basada en la humildad y el poder hacer felices a todos los niños del mundo con sus regalos.

El Espíritu de la Navidad las había elegido a ellas, su misión eran rescatar a Papa Noel y los Reyes Magos y destruir al malvado Grylo. Para ello le previno de un reloj de cuco para Carlota y un lápiz y cuaderno de dibujo para Frida.  Carlota pone en marcha las manecillas del reloj que giran y gira hasta llegar a la tierra de los Elfos. Allí las dos tendrán que hacer un largo recorrido atravesando bosques tenebrosos y montañas nevadas. A lo lejos se oyen un grito de socorro, socorro. De repente, Frida se detiene y le pregunta a Carlota si escucha algo raro.

-Carlota le responde que no, probablemente son las hojas de los árboles que las mueven el vientos respondió. Y continúa de nuevo su camino hacia la guarida de Grylo. Y de nuevo se oyen los gritos, eran los gritos de Fingolfin pidiendo ayuda. Socorro, ayuda me está arrastrando el rio, socorro. Frida vuelve a escuchar los gritos.

-Vamos Carlota corre, dice Frida. Llegan las dos al rio.

- Frida allí, señala con el dedo Carlota. Frida dibuja algo en tu cuaderno le dijo.Y Frida dibuja una cuerda que arrojan al rio y salvan a Fingolfin un elfo de apariencia frágil y delicada, orejas puntiagudas, piel pálida y ojos almendrados; que vivía en el tronco de un árbol. Fingolfin les da las gracias a las niñas.

Fingolfin les pregunto a las niñas por sus nombres y hacia donde se dirigía.

-Yo soy Frida y esta es mi hermana Pequeña Carlota y no dirigimos a la guarida de Grylo para rescatar Papa Noel y lo Reyes Magos respondió Frida.

Fingolfin que era un gran sabio y adivino como agradecimiento por su buen gesto les dijo como podían derrotar al maléfico Grylo y su feroz gato Yule.

-Frida tu tienes que quitarle la bolsa de polvos mágicos que muy cuidadosamente custodiaban a la cintura y  el bastón de cascabeles y pasárselo a tu hermana. Y tú Carlota tienes que echar los polvos mágicos sobre Grylo y Yule dar tres golpes con el bastón en el suelo y decir las palabras mágicas “Que la navidad os llene vuestros corazones de amor y de paz “añadió.

Las niñas se despidieron de su amigo Fingolfin y continuaron su viaje, conociendo a personajes fantástico como: Sílfides, duendes, ninfas, etc. y viviendo grandes aventuras por el camino hasta llegar a su destino.

Esperaron que llegase la noche escondida entre unos troncos caídos; mientras Frida dibujaba, Carlota descansaba.

Llego la hora de actuar. Ambas niñas se pusieron la capa de invisibilidad por lo alto y entraron a la guarida muy sigilosamente. Registraron una por una las habitaciones hasta dar con Grylo y Yule que se encontraba con Papa Noel y los Reyes Magos en la misma habitación.

-Ja, ja no esperéis ser rescatados por nadie le decía, la navidad va a desaparecer de la tierra, no habrán niños felices y solo recibirán regalos inútiles y feos. Ja, ja, ja.

-Papa Noel le responde que mientras hayan gente de buenos sentimientos la navidad siempre iba a existir en los corazones de las personas. Los tres Reyas Magos afirmaron con un ligero movimiento de cabeza.

A continuación, Frida en un descuido de Grylo coge el bastón y le golpea en la cabeza. Grylo cae al suelo aturdido y aprovecha quitarle la bolsa de polvos mágicos del cinturón para dárselo a Carlota. Mientras Frida entretiene a Yule, Carlota echa los polvos sobre Grylo y Yule, golpea tres veces el suelo con el bastón y dice las palabras mágicas. “Que la navidad os llene vuestros corazones de amor y de paz”.

Papa Noel y los Reye Magos fueron rescatados de su cautiverio y en agradecimiento a Frida y Carlota los tres les dieron sus regalos por adelantado.
 Grylo y Yule pasaron a ser los ayudantes de Papa Noel. Y la navidad volvió a ser aún mejor.

Las niñas volvieron al momento en que se habían marchado, entretanto su padre José colocaba la última figura en el Portal.

-Venid niñas llegáis justo a tiempo para ver cómo nos ha quedado el Belén dijo José.

-Muy bonito papa dijo Frida.

-Porque no pedimos unas pizzas para cenar dijo Laura y celebramos lo bien que no han quedado el árbol y el portal.

-Siiii, pizzas dijo Carlota.

 FIN de la primera PARTE.